Tal vez te preguntes en que ámbito cotidiano pueden convivir estos dos conceptos. Si conoces algo de mi mundo, seguramente pensarás que es alguna de mis pajas mentales. En realidad no se si es fácil de explicar. Hace unos días me encontraba en las oficinas de un cliente configurando el correo electrónico, con el que estábamos teniendo problemas gracias a que telefónica bloqueó sin previo aviso los puertos 25 y 26 del router de la oficina, impidiendo el envío de presupuestos, correo, durante casi dos días.
El motivo:
Telefónica consideraba que mi cliente había realizado spam (correo no solicitado) por enviar tarjetas de navidad de forma masiva, según telefónica, a más de 99 contactos. Da igual el peso del archivo, si escribes el correo en «copia carbón oculta», o cualquier otra cosa. Por supuesto, esta cláusula no aparece en el contrato, pero esta claro que ellos tienen la sartén por el mango en estos casos, y hay que tratar de solucionar los problemas de la forma más rápida.
La solución:
Desde el departamento de atención el cliente nos informaron de que efectivamente, habían bloqueado nuestros puertos y la única forma de solucionarlo, era contactar con el departamento Nemesys de telefónica, con el que solo se puede a través de correo electrónico, o por formulario en la siguiente página Web
www.telefonicaonline.com/nemesys en la que solicitas te desbloqueen la IP, prometiendo y jurando que no se volverá a repetir un envío del mismo tipo.
Este departamento no daba señales de vida, por lo que mi cliente tuvo que llamar de nuevo al departamento de atención el cliente, amenazando con denunciarles por incumplimiento de los servicios por los que pagaba cda més. A los 20 minutos ya podíamos enviar y recibir correo sin ningún tipo de problema, QUE LUJAZO!!!!
Momentos después en pleno auge de nuestros egos, comentábamos: «parece mentira que hace 5 años no necesitábamos apenas el correo electrónico y lo imprescindible que es ahora mismo para nuestro trabajo y nuestra vida», a lo que se oyó de fondo… «¿pero vosotros de que habláis del correo electrónico o de la PÍLDORA ANTICONCEPTIVA?», jejeje, QUE GRANDE!!!! Y aquí termina esta historia…
… espero que pueda servir para ayudar a alguien que le haya pasado algo parecido.